Seguramente has leído o escuchado que para el planeta y todos los seres vivos que aquí habitamos, es de suma importancia la conservación, rescate y resguardo de plantas y animales además de evitar la contaminación del agua y el aire pero… ¿Qué hay del suelo? ¿Crees que es importante?
Aunque rara vez se mencione, el suelo que todos los días pisamos es, junto con el agua que bebemos, el aire que respiramos y la luz solar que nos ilumina, un elemento indispensable para el desarrollo de la vida sobre la tierra.
El suelo, es un elemento vivo porque además de aire, agua y minerales, está formado de millones de microorganismos que, en su conjunto, nos proporciona alimento, ayuda a la recarga de los mantos acuíferos, y en él se establecen y desarrollan todas las plantas que forman bosques, selvas, matorrales y pastizales los cuales son el hogar de todos los animales del planeta. Es decir, el suelo es el sustento básico de la vida, sin embargo, sólo un suelo fértil puede proveer estos beneficios pero… ¿Sabías qué para formar 10 cm de suelo fértil y nutritivo se requiere un tiempo de 2 mil años?
Desafortunadamente, el ritmo de vida de la sociedad actual ocasiona que día a día desaparezcan grandes extensiones de áreas verdes naturales para dar paso a zonas de cultivo intensivo o, construcciones urbanas, entre otros, acciones que, junto con la erosión causada por el viento y la lluvia, provocan que se agote y se pierda el suelo fértil, el cual es irrecuperable.
Aunque parezca poco probable, el suelo fértil es finito es decir, tiene un límite y puede agotarse. Sin embargo, para contrarrestar lo anterior, existen proyectos que reconocen lo importante que es el suelo para la vida y contribuyen a través de ellos a su formación y conservación.