Originaria de México, la nochebuena, “cuetlaxóchitl” o “flor que se marchita”, se caracteriza por la delicada belleza de su flor (realmente son hojas modificadas llamadas “brácteas”). Desde la época prehispánica ha tenido un gran significado en la cultura azteca. México cuenta con cerca de 20 especies nativas parientes de la especie más común de nochebuena, conocida como Euphorbia pulcherrima.
Se encuentra en los estados de Morelos (principal productor nacional de esta flor), Guerrero, México, Puebla, Michoacán, Nayarit, Oaxaca y la Ciudad de México.
Una flor con historia
Para los aztecas la nochebuena simbolizaba la pureza de la sangre que, en los sacrificios, los indígenas ofrendaban al sol para renovar su fuerza creadora a fin de que el universo siguiera su marcha. En 1825, fue llevada a Estados Unidos por Joel Poinsett quien, como primer ministro de ese país en México, en uno de sus viajes descubrió esta bella flor en Taxco, Guerrero; posteriormente la flor viajó a Europa donde se desarrollaron nuevas variedades para sombra, que son las que compramos en macetas en la época navideña.
La nochebuena en nuestra cultura nacional
“…flor que se llama cuetlaxóchitl, de un árbol con hojas muy coloradas“
– Fray Bernardino de Sahagún
Además de la nochebuena existen otras especies de Euphorbia nativas de México que son endémicas (es decir no existen en otro lugar del mundo), los lugares donde ellas viven como bosques y selvas se están modificando, por lo que hoy en día hay varias especies en peligro de desaparecer.
Cuidados y reproducción
- Cuando termina el invierno, a las nochebuenas de sombra se les podan las ramas que tuvieron flor (por encima de la yema de una hoja).
- La planta se debe colocar en un lugar con resolana (no sol directo), aplicando riego una vez por semana.
- Cuando la planta tenga rebrotes, se le aplica, una vez por semana, una cucharada por litro de agua de nitrato de calcio y de una mezcla de nitrógeno, fósforo y potasio (NPK); los que se compran donde venden productos agrícolas.
- La planta se debe trasplantar a una maceta que sea dos veces más grande que el tamaño de la maceta original.
Desde mediados de septiembre a mediados de noviembre se deben cubrir con una caja o material oscuro, desde las 4 de la tarde hasta las 10 de la mañana, con el fin de promover que desarrollen su color rojo característico.
Riego
- El riego debe ser profundo, una o dos veces por semana, cuidando que no se acumule agua en el follaje, para evitar manchas en él.
Plagas y enfermedades
- Pueden presentarse araña roja y mosquita blanca. Para su control se sugiere aplicar el siguiente remedio casero: licuar 10 chiles picantes, una cabeza de ajo y una cebolla con una taza de agua. En otro recipiente, diluir 200 g de jabón de pasta rallada en una taza de agua. Se mezclan ambas soluciones y se aplica con un aspersor una vez por semana, de preferencia por las mañanas.
Importancia y uso
- Es importante desde el punto de vista ornamental y medicinal.
- Los fomentos hechos con esta flor se utilizan para tratar problemas con la piel como la erisipela.
- También se utiliza para combatir las verrugas, aumentar la leche en las mujeres que amamantan, cura fuegos de la boca, llagas y para aliviar dolores por golpes.
- Los pétalos machacados y mezclados con la resina de los pinos eran usados para teñir el cuero.
Te invitamos a seguir estos sencillos pasos y contribuir con ello a la conservación de la “flor que se marchita”:
- Planta en tu jardín nochebuena silvestre, la cual es arbustiva y de sol.
- A finales de año puedes visitar Taxco y Cuernavaca, donde el 8 de diciembre se festeja el día de la nochebuena.
Si te gustó la “flor de cuero” y quieres contribuir a su conservación te invitamos a que pongas en práctica lo que aquí has aprendido. Puedes propagarla, plantarla y cultivarla en tu casa, en un parque o en un jardín cercano a tu hogar.