En las tiendas de autoservicio puedes encontrar un limpiador especial para cada caso que te puedas imaginar, sin embargo, muchas veces tienes en casa lo que necesitas para realizar la limpieza.
De hecho, muchos de los limpiadores comerciales se basan en alguno de los cuatro siguientes productos:
- Vinagre.
- Sal.
- Jugo de limón.
- Bicarbonato de sodio.
El vinagre es excelente para limpiar ventanas, parrillas de estufa, tarjas, y hornos.
La sal disuelta en agua puede servir para limpiar manchas de café, manchas de sudor en ropa, y tablas de picar (mezclada con limón).
El jugo de limón es un desinfectante natural y sirve para limpiar óxido, retirar manchas de perecederos de platos, cubiertos y otros utensilios de metal.
Con bicarbonato de sodio puedes limpiar cubiertos, la grasa que se acumula en muebles al cocinar, y losetas de tus baños. Solamente mézclalo con agua y utiliza una fibra limpiadora.
Como verás, puedes utilizar productos naturales y ecológicos para realizar limpieza en tu casa.