Hoy te compartimos algunas recomendaciones sencillas de seguir para ayudar a reducir el consumo de agua en tu cocina y por lo tanto del agua total que consumes en casa.
- Platos, ollas y trastos. Utiliza el fregadero medio lleno para limpiar los platos, ollas y trastos, enjabónalos, tállalos, y solo abre la llave al final para enjuagarlos rápidamente. Antes de colocar los platos en el fregadero remueve los restos de comida que puedan contener. Si las ollas y sartenes están engrasados o con comida pegada puedes dejarlos remojando con un poco de agua antes de lavarlos para que su limpieza sea más fácil y rápida.
- Frutas y verduras. Llena con agua el fregadero o un recipiente para limpiar y lavar las verduras, frutas y otros alimentos. Recuerda no dejar abierta la llave mientras los lavas.
- Lavavajillas. Si usas una lavavajillas, ésta debe estar llena (carga completa), ya que cuando la utilizas en una carga media de todos modos consume mucha agua y energía.
- Grifos y llaves. Revisa con periodicidad que los grifos y llaves de tu cocina no tengan goteras o pequeñas fugas. Puedes utilizar grifos con reductores de caudal.
- Limpieza. Limpia los platos después de comer para evitar que la comida y grasa se adhiera a estos y sea difícil de quitar. Del mismo modo, si ves una mancha en el piso o la cubierta de tu cocina, debes limpiarla de inmediato ya que así evitas el uso de mucha agua y de limpiadores fuertes. Reduce la frecuencia con la que trapeas el piso de la cocina.
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